Tarot y Semana Santa, una conexión profunda, aunque pocas veces se hable de ella
La Semana Santa representa un viaje iniciático: paso por el dolor, la muerte simbólica, el vacío y la resurrección.
El Tarot, como lenguaje espiritual y arquetípico, también describe este viaje a través de los Arcanos Mayores.
La Semana Santa, leída desde el Tarot, no es solo la historia de un ser iluminado: Es el camino del alma humana.
Cada año, nos invita a morir a lo viejo, esperar en la fe, y resucitar a nuestra verdad más profunda.
Domingo de Pascua Hoy finaliza la Semana Santa. Hoy es día de renacimiento solar. El Sol brilla en lo alto, anunciando que el viaje lunar —el descenso a nuestros misterios, las emociones y las sombras del pasado— ha sido realizado con éxito. Misión cumplida.
La Luna, como una lejía astral, ha cargado con todo lo que ya no era necesario: memorias, dolores, costras de viejos sentimientos, heridas no cicatrizadas …. se lo ha llevado todo.
Ahora, en esta Pascua luminosa, la maduración, se convierte en Sol. Y el Sol, tanto en el Tarot como en la Astrología, representa la conciencia que ha atravesado la noche y se establece en su centro radiante. Claro, no es gratis llegar al Sol. Tiene su precio.
El mensaje de la Semana Santa llega a su fin: asentarnos en nuestro Sol interior; el eje sobre el cual gira toda la carta natal, el corazón de la identidad.
El viaje ha valido la pena.
Somos luz consciente en expansión. Felices Pascuas!
Tarot of the Secret Forest. Collage EsotéricaBlog (2025)
Sábado Santo El Sábado Santo es el día del gran silencio, del vacío después de la muerte y antes de la resurrección. Es el tiempo de la espera sagrada, del no saber, del confiar en la semilla que germina en la oscuridad. Es el día que mejor vibra con el Ermitaño: caminar en la noche con la fe encendida dentro del pecho.
Hoy, el mundo guarda silencio, y yo también.
Todo renace primero en la sombra
Confío en la luz que sostengo, aunque parezca pequeña:
ella es la promesa del nuevo día, y de mi nuevo yo.
The Hermit – Tarot of The New Vision.
Viernes Santo «Todo es temporal. Aprecia lo que tienes mientras lo tienes», leí hoy en X. Puede resonar con varios arquetipos, pero hay uno que lo encarna con especial fuerza: el Arcano XIII.
La Muerte – Transformación, fin y renacimiento: es el más contundente recordatorio de que nada permanece sin cambios: todo se transforma, muere para dar paso a lo nuevo y renovado. Aunque a menudo suele provocar resistencia y miedo, este arcano no debe ser visto como un final, sino como un rito de paso, liberación y renovación.
El arquetipo de La Muerte resuena profundamente con el espíritu de la Semana Santa: una narrativa sagrada de transformación.En astrología, el arquetipo de La Muerte del tarot se manifiesta en Plutón, el planeta de la transformación profunda, la muerte simbólica, el renacimiento, el poder oculto y lo inevitable. Ambos, Plutón y el Arcano XIII, nos invitan a confrontar lo esencial, a lo que no podemos dominar. Nos animan a mirar directamente lo que muere en nosotros, no con miedo, sino con reverencia.
Tarot Rider Waite-Smith
Jueves Santo La sabiduría del Tarot, de Elisabeth Haich (libro que estoy buscando si éxito en español, de la Editorial Luciérnaga, editado en el 2002), explica que el Tarot no es un simple juego de cartas ni un método de adivinación superficial. Todo lo contrario.
Haich explica que el Tarot es, en su visión, un sistema simbólico profundo, que contiene enseñanzas ocultas sobre el desarrollo espiritual del ser humano. Y que cada Arcano Mayor representa una etapa en la evolución del alma humana: desde su estado original (el Loco) hasta su perfección (el Mundo).
A lo largo de la obra, nos prepara explicando que el trabajo con los Arcanos es un camino de transformación: quien estudia el Tarot conscientemente no queda igual, porque cada símbolo actúa como una llave para abrir puertas internas. Y que (para mí, lo mas importante) comprender el Tarot no es cuestión de estudio intelectual, sino de despertar interior.
Arcano, Healing Light Tarot – Lo Scarabeo.
Miércoles Santo Entramos en la semana lunar más fuerte del año: la Semana Santa. La Luna se alinea con el misterio de estos días sagrados porque representa el viaje iniciático y la noche oscura del alma.
La Luna nos recuerda que cada renacimiento necesita su noche, su tránsito por lo desconocido. Y que cada descenso hacia nuestra matriz emocional es un proceso necesario para renacer como figura solar: más centrada, más madura, más plena. A veces, nos arrastra al fondo del pozo para que escuchemos lo que allí tenemos : emociones no expresadas, dolores no contados, memorias olvidadas que laten bajo la superficie.
La Luna nos enfrenta – y nos obliga – al dolor que arrastramos, y no escuchamos. No nos acaricia: nos desnuda. Y sin embargo… en ese vacío, en esa tristeza honda, algo se limpia. Algo se ordena. Algo se prepara para renacer. Morimos. Y eso duele. Pero también libera.
Como en todo proceso alquímico, esta semana – la mas lunar del año- la luna nos invita a descender, a estar en silencio y recogimiento, a morir simbólicamente a viejas formas, para el domingo resurgir – como el Sol – con una nueva conciencia.
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.
